Aceptemos de que el país sufre un periodo de inflación pero también es cierto de que la falta de gestión y la toma de decisiones erradas, han obligado al municipio a pedir un porcentaje bastante importante y que incidirá en el presupuesto diario de nuestros vecinos.El centro de estudio Amadeo Sabattini ha venido criticando ciertos actos que, con el correr del tiempo, provocaron un delicada situación económica en el municipio local. El gasto excesivo en publicidad, la inversión en obras que no eran prioritarias (como la terminal de ómnibus), entre otras, fueron desencadenantes de este aumento.
La improvisación y la ausencia de gestión nos saldrá caro a los riotercerenses. Mientras algunos se dedican a viajes por el extranjero o a pensar en candidaturas, hace falta que le recordemos que todavía tienen 2 años para trabajar por Río Tercero...
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